miércoles, 13 de agosto de 2025

El escudo de COCENTAINA. Capital de la comarca del COMTAT

 

En esta entrada del blog se muestra la descripción del escudo de COCENTAINA (Alicante), ciudad natal de su autor, que aparece en la revista de Moros y Cristianos correspondiente al año de su nacimiento.

Pero la heráldica evoluciona para adaptarse a los tiempos modernos y a la normativa vigente en la materia, así, los escudos se van transformando, para simplificarse, lo que implica que pueden perder algunos de sus elementos tradicionales, como es el caso de éste.

Un doble motivo es lo que forma el escudo de un pueblo o nación: la objetividad de un resumen de gestas históricas o de naturaleza y el ideal que se propone realizar.

La unión de estas dos interpretaciones viene a dar como el resultado de lo que debe reunir un escudo en el campo de la idea y después, según las leyes de ornamentación, en el campo de la plástica.

Aplicando estos principios de heráldica al Escudo de Cocentaina, brotan al instante un conjunto de luminosas ideas.

Por una parte, se amontonan en nuestra imaginación toda la leyenda y la historia cargada de pergaminos, desde los tartesios a «contestani romani», desde el Cid Conquistador, desde los Señoríos y Reinas a Condes y Duques. Y por otra, la tradición y nuestra historia impelen a una actividad enérgica y consciente de la vida de hoy. 

Escudo actual de Cocentaina

ELEMENTOS DEL ESCUDO.- En la parte central, de forma ovalada, más italiana que española, aparecen: un Castillo o fortaleza, que sostiene el escudo de las Cuatro Barras; las letras SPQC; enmarcando el castillo una palma y un ramo de laurel, que con sus troncos, dividen una porción de agua en tres partes. En lo alto, la Corona, fusión de real y condal, por media de la cual pasa el cetro que remata en cruz. En la parte inferior un pergamino de cinco rollos.

El CASTILLO representa la fortaleza árabe en el cerro de la montaña, símbolo de toda una fe firmísima y temple de guerreros, indestructibles ante los enemigos del alma y el cuerpo.

Vista de Cocentaina amurallada y su castillo en lo alto

Las BARRAS rojas sobre oro, pintadas con los cuatro dedos del Rey Carlos el Calvo y ensangrentados en la llaga del Conde catalán Wifredo el Velloso, es el escudo que fue de Cataluña, de Aragón y de Valencia, por las relaciones íntimas entre Aragón, los Virreyes de Valencia y Cocentaina.

Las letras SPQC rezan en latín «Senatus PopulusQue Contestanus». El «que» pospuesto es conjunción copulativa antecedente de «y». Quieren decir «Senado (o Autoridades) y Pueblo Contestano” que recuerda a «Senatus Populusque Romanus» de la Capital de Provincia Romana. Recuerda también las letras del escudo y bandera del capitán romano, San Hipólito.

Los RAMOS de laurel es el triunfo glorioso de nuestros capitanes, letrados, industriales, artistas, santos y d ellos labradores que convierten el campo en riqueza. Mohamad Ben Ysmail, Roger de Lauria, Escuder, Corella, Espinosa, Crevea, etc., entre muchos otros nombres ilustres.

La PALMA es el premio que merecieron los nobles hijos de esta Condal Villa, en las batallas, el recuero de los mártires y el sacrifico de los misioneros y religiosos.

Las AGUAS divididas al pie del Castillo, simbolizan las tres clases de agua de Cocentaina: el Serpis, rio de Penágulla y las buenas aguas de Mariola «tota a fontetes», como dice el cancionero.

La CORONA es de las Reinas, Condes y Duques que las usaron, linajes que engrandecieron a Cocentaina.

El CETRO REAL, que pasa por dentro de la Corona, recuerda a las Reinas Doña Sibila y a Doña Violante, que gobernaron directa y personalmente las tierras contestanas.

La CRUZ que remata el cetro, quiere decir todo el resumen del escudo y del pueblo, que fue siempre el de defender el Cristianismo.

El PERGAMINO, con sus cinco rollos, representa: la fundación de Cocentaina, la Elección en Capital de la Provincia romana, la Elevación al título de Condado, el ACTA del milagro de las lágrimas de la Virgen y el Patronato de San Hipólito Mártir.

 

JOSÉ SOLER CARDONA, PBRO.

Cuna, origen y centro de las Fiestas de Moros y Cristianos

 
Las comparsas que protagonizan la fiesta, conocidas como 'filaes' representan a los dos bandos, el moro y el cristiano. Cada 'filà' tiene su propia indumentaria, escudo y singularidad. Y cada año, una por bando ostenta el cargo de la capitanía, y otra distinta la de abanderado.
 

 

 

martes, 5 de agosto de 2025

La heráldica: entre la ciencia y el arte

 

La heráldica, tradicionalmente considerada una ciencia auxiliar de la historia, se encarga del estudio y la interpretación de los escudos de armas, sus reglas, colores y símbolos. Sin embargo, más allá de su aspecto técnico y normativo, la heráldica es también, y quizás, sobre todo, un arte.

Me cabe la satisfacción de presentar en la entrada de este blog el escudo de armas del caballero peruano Alexis Rolando Arévalo Vergara, Caballero de mérito en Gran Magistero del Sacro Militare Ordine Costantiniano di San Giorgio, Fundador y Académico de Número en Academia Sanmartinense de Heráldica y Genealogía, Abogado en la Gerencia Legal en Banco de la Nación y Rector de las órdenes dinásticas georgianas en Perú en საქართველოს სამეფო სახლი - The Royal House of Georgia. 

Este trabajo ha sido realizado por el joven, pero ya prometedor y habilidoso artista con técnicas digitales, Nikolai López Pomar.

Este arte se manifiesta en la composición visual de los escudos, donde cada elemento —desde los esmaltes hasta las figuras— no solo cumple una función identificativa, sino también estética. La armonía de colores, la disposición simbólica y el equilibrio de formas responden a principios artísticos que permiten comunicar identidad, linaje y valores con una sola imagen.

Los heraldistas, como artistas, deben poseer un fino sentido del diseño para crear composiciones que sean visualmente impactantes y fieles a la tradición. A través de siglos, la heráldica ha influido en el arte decorativo, la arquitectura, la pintura y la escultura, dejando una huella estética profunda en la cultura visual europea.

Armas de José M. Huidobro, por NLP

Por tanto, la heráldica no solo conserva y ordena símbolos del pasado: los embellece, los estiliza y los transforma en una expresión artística perdurable. Pero, en cada escudo bien diseñado debe haber tanto rigor científico como creatividad artística.

sábado, 2 de agosto de 2025

La Nobleza en el Reino de Valencia

 

En la Real Cédula de Luis I de 14/8/1724 sobre la Nobleza del Reino de Valencia se divide a este estamento en cuatro categorías: Nobles, Generosos, Caballeros y Ciudadanos. 

La Real Cédula del Señor Don Luis I sobre la nobleza del Reino de Valencia, fechada el 14 de agosto de 1724, regulaba la nobleza en este reino, manteniendo las cuatro clases propias de la Reconquista, a diferencia de Castilla. Esta cédula fue posteriormente analizada y comentada por Mariano Madramany y Calatayud en su obra "Tratado de la Nobleza de la Corona de Aragón: especialmente del Reyno de Valencia, comparada con la de Castilla".

 Texto extraído del elaborado por: Enrique Mira-Perceval Verdú 

https://emiraperceval.wordpress.com/la-nobleza-en-el-reino-de-valencia/

Los Nobles: eran los descendientes de los Ricohombres y Mesnaderos aragoneses y catalanes que sirvieron al Rey Jaime I en la conquista del reino de Valencia.

Los más destacados eran los Ricohombres que obtuvieron baronías feudales. Le seguían los Mesnaderos, vástagos de las principales familias que siguieron al rey y que obtuvieron señoríos feudales. Ambos con jurisdicción civil y criminal.

También con posterioridad eran Nobles a los que se les había dado Real Título de tales ya procediesen de unos o de otros.

Usaron el prenotado de “EN” antecediendo a su nombre. Estos títulos de Barón y Señor posteriormente lograron su conversión en Títulos de Castilla.

A todos ellos hay que unir a los Títulos del reino que una vez se unieron las Coronas comenzaron a prodigarse, esto es: Duques, Marqueses, Condes y Vizcondes.


Los Caballeros: eran aquellos que habían sido armados Caballeros bien por el Rey o por un Barón, en una ceremonia que además de la pezconada con la espada se le imponía las espuelas de oro. A estos se les llamaba “Caballeros de Espuela Dorada” y a sus hijos se les llamaba “Doncel”, en tanto no se armasen caballeros

Aquellos que el Rey deseaba ennoblecer les otorgaban privilegio de generosidad con la obligación de armarse caballeros en el plazo de un año. A estos se les llamó “Caballeros de rescripto”. A sus hijos se les llamó “Hombres de Paratge”.

Tuvieron el derecho de usar el prenotado de “Mossen” antecediendo a su nombre.

Los Generosos: Es el nombre que recibían los nobles de sangre en Valencia que no habían conseguido un título del Reino, baronía o señorío ni que habían sido armados caballeros pero que eran descendientes de ellos. Su condición es similar a la de los infanzones de Aragón o a los hidalgos de Castilla. Se distinguían los denominados Generosos de Conquista descendientes de los caballeros que vinieron con el rey Jaime y los Generosos de rescripto a los que el Rey les había concedido el privilegio de Generosidad para poder ser armados caballeros en el plazo de un año.

Las tres clases descritas de Nobles, Caballeros y Generosos formaban el Estamento Militar en las Cortes del reino de Valencia donde entraban sin distinción de asientos ni lugares.

Los Ciudadanos: Tras la conquista del Reino de Valencia hubo una serie de Infanzones o Generosos que prefirieron permanecer en las ciudades renunciando a ser armados Caballeros a fin de poder acceder a los cargos de Regidores y Jurados de las poblaciones en que residían. Sus hijos y descendientes, unos retornaron a su condición y fuero militar mientras que otros siguieron ejerciendo los cargos municipales. A todos ellos se les llamaron Ciudadanos de Inmemorial o de Conquista siendo reputados siempre por Infanzones de sangre y solar conocido aunque asistían a las Cortes del Reino dentro del Estamento Real en el que se agrupaban los representantes de las ciudades de realengo.

En el reino se desarrolló una pujante burguesía dedicada a la actividad industrial y mercantil manteniendo un fastuoso y refinado nivel de vida por lo que fueron conocidos como “Ciudadanos Honrados” recibiendo el prenotado de “Honrat” siendo admitidos a los cargos de Regidores y Jurados, incluidos en las listas o matrículas de insaculados que para este menester se establecían por lo que recibirían el nombre de “Ciudadanos de Matrícula”. Pero no consiguieron la condición de nobles. También a este grupo se les unirían los intelectuales como los Doctores y Licenciados en Leyes y Medicina a los que se les denominó “ciudadanos de rescripto o de privilegio de insaculación”. Sólo se les reconoció la nobleza a estos ciudadanos de matrícula o rescripto a aquellos establecidos en Valencia, Alicante y Játiva por especiales privilegios concedidos a estas ciudades por el Rey en 1420 en Valencia por privilegio de Alfonso III de Aragón y en Alicante en 1687 y Játiva en 1689, ambas por el rey Carlos II.

Así si tuviéramos que ordenarlos jerárquicamente esta sería la distribución:

    Títulos del Reino, Barones y Señores

    Nobles de rescripto.

    Caballeros de Espuela Dorada

    Caballeros de Rescripto

    Generosos

    Generosos de Rescripto.

    Ciudadanos de Inmemorial o de Conquista (todos considerados nobles con independencia del lugar de su residencia).

    Ciudadanos de Matrícula o de privilegio (sólo considerados nobles a los de Valencia, Alicante y Játiva)

    Ciudadanos Honrados (no considerados pertenecientes a la nobleza)

INFANZONES DEL REINO DE VALENCIA

Para saber más